El año en que Apple perdió el control (y lo que esperamos en 2026)

2025 pasará a la historia como uno de los años más convulsos de Apple en mucho tiempo. No por falta de lanzamientos —los ha habido, y buenos—, sino por una sensación generalizada de que la compañía ha ido un paso por detrás en demasiados frentes.

El año arrancó con el iPhone 16e, un modelo que llegó bien equipado pero lastrado por un precio que muchos consideraron excesivo. Después vinieron el MacBook Air M4 y el iPad Air M3, dos productos sólidos que confirmaron que Apple sigue sabiendo hacer hardware de primer nivel. En verano, el Liquid Glass revolucionó la estética de todos los sistemas operativos, aunque su recepción fue tibia: muchos usuarios lo aman, otros lo encuentran excesivo o mal implementado en dispositivos pequeños como el Apple Watch.

Pero lo que realmente ha marcado el año ha sido lo que no llegó. La nueva Siri, prometida como el gran salto en inteligencia artificial, se retrasó indefinidamente. Apple Intelligence aterrizó en español, sí, pero a medias, sin las funciones que de verdad habrían supuesto un cambio de paradigma. Y mientras tanto, un goteo constante de directivos abandonando la compañía ha dejado la sensación de que algo no termina de funcionar en Cupertino.

¿Lo mejor del año? El iPhone 17 estándar. Apple por fin ha escuchado las críticas y ha entregado un modelo equilibrado, con pantalla grande, buena batería y cámara frontal renovada. Un iPhone que no te obliga a pagar el precio del Pro para tener una experiencia completa.

En el episodio de esta semana repasamos todo esto mes a mes, con las luces, las sombras y, sobre todo, lo que esperamos que Apple corrija en 2026.